¿Dónde están los entrenadores?.
Ayer conocimos que desde el 8 de Junio puede regresar la Liga de Fútbol Profesional. En esta época de sobre información y donde hemos conocido al dedillo las negociaciones, opiniones y distintas versiones que se iban dando al respecto de las competiciones o de las distintas fases de desescalada hemos echado en falta la figura de los entrenadores.
Esta semana El Confidencial a través de un artículo de Ulises Sánchez Flor mostraba el hartazgo de algunos reputados entrenadores de 1ª División al respecto de que no se les había consultado como elaborar el “Protocolo” de reinicio de la competición. Hablaban incluso de “ninguneo” de la figura del entrenador. LaLiga con su Protocolo ya les ha marcado como deben realizar las concentraciones, comidas, viajes, cuándo y cómo realizar los entrenamientos conjuntos, etc…Y todo esto sin consultar a los entrenadores que al fin y al cabo son los máximos responsables de la dirección técnica de las plantillas y algo tendrán que decir al respecto.
Estamos de acuerdo que los jugadores/deportistas son los principales protagonistas. Pero no solo los únicos. En este “circo” que por momentos se ha convertido el deporte también hay árbitros, técnicos, directivos, etc…Y aquí, se nos ha mostrado públicamente como solo a las asociaciones de jugadores se les ha tenido en cuenta (indudablemente por su gran peso y representatividad). No hemos visto ni hemos sido informados públicamente de reunión alguna con los “supuestos” representantes de los entrenadores para saber su opinión al respecto de cómo elaborar el Protocolo de vuelta a la Competición. No se les ha tenido en cuenta.
Pero otro hecho que ha sucedido esta semana también nos ha llamado la atención: Según informaron las webs Iusport.com y sport.com el CSD aprobó la Modificación del Reglamento General de la RFEF y en concreto el artículo “que prevé que cuando se extinga el vínculo contractual entre un club y su entrenador (cualquier tipo de entrenador), éste último no podrá actuar en otro club en el trascurso de misma temporada.”
Este artículo le impedía al entrenador que salía de un equipo con la Temporada no iniciada o en marcha, poder entrenar en otro equipo a lo largo de esa misma Temporada. Una circunstancia que a nosotros se nos antoja injusta y hasta contraria al derecho fundamental del trabajador. Casos sonados son los de Marcelino García Toral en el 2016 o el de Oscar Fernández al inicio de la presente temporada cesado en la UD Almería sin haber iniciado la competición. En ambos casos se tuvieron que pasar una Temporada en blanco “gracias” al artículo 162 del Reglamento General de la RFEF.
Con la nueva redacción, ahora para aplicarse el Art. 162 se debe de haber disputado un partido oficial de la competición (1ª o 2ª División). Por lo tanto si los entrenadores son cesados en pretemporada podrían firmar por otro equipo. Igualmente se recogen ciertos casos concretos en los que también se autorizaría a los entrenadores a poder fichar por otro equipo (en otra categoría, ojo…o en otro grupo si es la misma categoría) como son los casos en los un club es declarado en concurso de acreedores.
Permítanme la expresión, pero “para este viaje no necesitaban alforjas”. Las modificaciones del artículo 162 son a todas luces mínimas. ¿Cuántos casos se dan de ceses en Pretemporada?…ya lo hemos visto, apenas se producen. ¿Cuántos despidos de entrenadores se deciden a lo largo de una Temporada?….también lo hemos visto, multitud verdad?. Siempre el primero que sale es el entrenador. Ha sido así, y así será.
El entrenador siempre es el eslabón más débil y más vilipendiado dentro del mundo del deporte. ¿Cómo es posible que a un trabajador se le impida realizar su profesión durante meses teniendo la posibilidad de realizarla?. Acaso no es una injusticia?. Acaso el derecho al trabajo no es un derecho fundamental?…Y en ese caso: Por qué no se estipula y legisla la posibilidad que tienen los entrenadores de realizar su trabajo con total libertad.?. Totalmente injusto.
Los entrenadores hoy en día somos “un mal necesario” como me decía un buen amigo estos días. No se nos tiene en cuenta en las decisiones y carecemos de voz y voto de peso en los distintos foros que representan al deporte, ojo no solo del fútbol.
Se hace necesaria una verdadera representatividad de los técnicos en los órganos que toman las decisiones en el deporte de nuestro país. Vemos con envidia y admiración como las distintas organizaciones de deportistas o de clubes han conseguido un estatus que ya para los entrenadores quisiéramos. Es el momento de que los entrenadores de las distintas especialidades deportivas se unan y defiendan unos derechos que a todas luces le son legítimos.
José Antonio Valle
Entrenador de Fútbol Sala